Nació en Stuttgart, Alemania, el 19 de enero de 1901. Reencuentro,
escrito en 1960, no es una obra autobiográfica, aunque, como dice el
propio autor, contiene elementos característicos del género. Los
alumnos, profesores y el ambiente de esta novela son un fiel reflejo de
la escuela donde Uhlman cursó sus estudios: el famoso Eberhard-Ludwing
Gymnasium, la institución de enseñanza media más antigua y prestigiosa
de Würtemberg. Y es el amor por esta región lo que ilumina todas y cada
una de las páginas de la obra.
Un
amor que acompañó a Uhlman en 1933 cuando, siendo un abogado
socialdemócrata, partió hacia un largo exilio. Desde esa fecha, residió
en París, donde su titulación de abogado no le fue de utilidad y se
dedicó a la pintura para sobrevivir. Con posterioridad se dedicó incluso
a diversos negocios de variada índole.
En
1936 pasó un breve período en España, donde conoció a Diana, una mujer
inglesa que pasaba sus vacaciones en nuestro país y que se convirtió en
su mujer. Ese mismo año se trasladó a Inglaterra, donde a pesar de su
condición permanente de extranjero se enamoró del campo inglés, porque
le recordaba a su tierra natal.
Fundó
la Liga Libre para la Cultura, con el fin de ayudar a los artistas y
científicos alemanes en el exilio, que intentó atraer hacia sus filas a
personajes tales como Einstein. A causa de su origen alemán fue recluido
en un campo de prisioneros durante 6 meses por ser sospechoso de
espionaje.
Dentro de su obra literaria, el título más aclamado es el de Reencuentro,
escrito en un momento en el que el propio Uhlman reconocía su escaso
éxito como pintor. La novela fue prologada por Arthur Koestler y se
convirtió en un bestseller. La segunda parte de esta novela se llama Un hombre valeroso.
Fred Uhlman murió en 1985, poco después de publicar su autobiografía.
